La diferencia entre la capacitación de soft skills y hard skills en una PYME, y la importancia del apoyo de los gerentes funcionales.

La capacitación de los empleados es un pilar fundamental para el crecimiento y éxito de cualquier organización, y en las pequeñas y medianas empresas (PYMEs), este aspecto es aún más crucial debido a los recursos limitados y la importancia de la productividad individual. Para desarrollar un equipo de trabajo competente, las PYMEs deben invertir en dos tipos de capacitación clave: hard skills y soft skills. La correcta implementación de ambas depende de la colaboración estrecha entre los gerentes funcionales y el departamento de Recursos Humanos (RRHH), quienes deben trabajar juntos para diseñar programas de formación adaptados a las necesidades específicas de la empresa.

¿Qué son las hard skills y las soft skills?

1.     Hard skills

Las hard skills (habilidades técnicas o duras) son competencias específicas, cuantificables y enseñables que un colaborador necesita para realizar su trabajo de manera eficiente. Estas habilidades suelen estar relacionadas con conocimientos técnicos o procedimientos que se pueden medir objetivamente. Ejemplos comunes de hard skills incluyen:

·         Manejo de software o herramientas específicas.

·         Habilidades de programación y análisis de datos.

·         Conocimientos contables o financieros.

·         Técnicas de ventas o marketing digital.

·         Operación de maquinaria o equipos.

En una PYME, los hard skills varían según el departamento y las funciones del colaborador. Por ejemplo, un desarrollador web necesitará habilidades técnicas en programación, mientras que un miembro del equipo de ventas necesitará dominar estrategias de negociación.

2.     Soft skills

Los soft skills (habilidades blandas) son competencias relacionadas con el comportamiento interpersonal y las habilidades de comunicación. Son más difíciles de cuantificar, pero no menos importantes, ya que influyen en cómo un empleado interactúa con los demás y cómo maneja las situaciones en el entorno laboral. Las soft skills incluyen:

-          Comunicación efectiva.

-          Liderazgo y gestión de equipos.

-          Resolución de problemas.

-          Adaptabilidad y manejo del cambio.

-          Inteligencia emocional y trabajo en equipo.

Los soft skills son esenciales para que los empleados no solo sean técnicamente competentes, sino que también puedan colaborar eficazmente y manejar los desafíos cotidianos en la empresa.

Diferencia clave entre hard skills y soft skills

La principal diferencia entre hard skills y soft skills radica en su naturaleza y cómo se aprenden. Los hard skills suelen ser adquiridas a través de la educación formal, como programas de capacitación técnica, cursos o certificaciones, y se pueden medir fácilmente mediante pruebas o evaluaciones. Por otro lado, los soft skills tienden a desarrollarse a lo largo del tiempo mediante la experiencia y el autoaprendizaje, y aunque son más difíciles de evaluar, su impacto en la dinámica de trabajo es significativo.

Mientras que los hard skills aseguran que un empleado pueda realizar las tareas técnicas de su puesto, las soft skills permiten que ese empleado colabore eficazmente con los demás, lidere cuando sea necesario, y maneje situaciones complejas o inesperadas.

La importancia de la capacitación en soft skills y hard skills en una PYME

1.     Aumento de la productividad y eficiencia

Los hard skills garantizan que los empleados sepan cómo utilizar herramientas y realizar tareas específicas necesarias para su trabajo. Sin embargo, sin los soft skills, como la gestión del tiempo o la comunicación efectiva, es probable que la productividad se vea afectada. Al combinar ambas capacitaciones, las PYMEs pueden asegurarse de que sus colaboradores no solo realicen sus funciones con precisión, sino que también lo hagan de manera eficiente y en armonía con el equipo.

2.     Mejor trabajo en equipo y colaboración

Los soft skills son fundamentales para el trabajo en equipo y la colaboración. En una PYME, donde los equipos suelen ser pequeños y la comunicación constante es esencial, habilidades como la inteligencia emocional y la capacidad de resolución de conflictos son claves para mantener un entorno de trabajo saludable y productivo.

3.     Preparación para roles de liderazgo

Los soft skills son esenciales para los empleados que aspiran a roles de liderazgo o gestión. Una PYME que invierte en la capacitación de habilidades blandas prepara a sus futuros líderes para que puedan gestionar equipos, tomar decisiones estratégicas y enfrentar desafíos con confianza y empatía.

4.     Adaptación al cambio y resiliencia

En el entorno dinámico de una PYME, donde las condiciones del mercado pueden cambiar rápidamente, los empleados necesitan tanto los hard skills para adaptarse a nuevas tecnologías o procesos, como los soft skills para gestionar el estrés, adaptarse al cambio y mantener la motivación.

El rol de los gerentes funcionales en la capacitación

Para que los programas de capacitación sean efectivos, los gerentes funcionales deben jugar un rol activo en el diseño y contenido de la capacitación. Esto es crucial, ya que los gerentes tienen un conocimiento profundo de las necesidades técnicas y conductuales de sus equipos. La colaboración con Recursos Humanos en este aspecto asegura que las capacitaciones se alineen con las exigencias reales de cada puesto y de la organización.

1.     Identificación de necesidades específicas

Los gerentes funcionales son los más indicados para identificar los hard skills específicas que necesita cada miembro de su equipo. Al participar en la creación del contenido de la capacitación, pueden garantizar que se aborden las habilidades técnicas necesarias para el desempeño óptimo de sus equipos.

2.     Enfoque en el desarrollo de soft skills relevantes

Aunque RRHH puede tener una visión general de las habilidades blandas necesarias, los gerentes funcionales conocen de primera mano los desafíos interpersonales y comunicativos que enfrentan sus equipos. Al colaborar con Recursos Humanos, los gerentes pueden identificar qué soft skills son más críticas, ya sea mejorar la comunicación en equipo, fomentar el liderazgo o desarrollar mejores habilidades de resolución de problemas.

3.     Desarrollo continuo y seguimiento

El aprendizaje no debe terminar con una sola sesión de capacitación. Los gerentes funcionales deben estar involucrados en el seguimiento y la retroalimentación continua del desarrollo de sus empleados, evaluando cómo están aplicando las nuevas habilidades en su trabajo diario y sugiriendo áreas de mejora.

4.     Adaptación a los cambios tecnológicos y del mercado

En una PYME, los cambios en tecnología y el mercado pueden ser rápidos. Los gerentes funcionales pueden trabajar con RRHH para ajustar las capacitaciones de hard skills según las nuevas herramientas o procesos que adopte la empresa, asegurando que los empleados estén siempre actualizados.

La sinergia entre Recursos Humanos y los gerentes funcionales

Para que la capacitación en soft skills y hard skills sea efectiva en una PYME, es esencial que RRHH y los gerentes funcionales trabajen de manera conjunta. Recursos Humanos tiene el conocimiento sobre las metodologías de capacitación, el acceso a proveedores externos, y la capacidad de implementar programas de formación a nivel organizacional. Por otro lado, los gerentes funcionales aportan un entendimiento profundo de las necesidades técnicas y de comportamiento específicas de sus equipos.

Cuando ambos departamentos colaboran, se puede diseñar un programa de capacitación equilibrado y relevante que fortalezca tanto las habilidades técnicas como las habilidades blandas, asegurando un equipo más competente, adaptable y cohesionado.

Conclusión

La capacitación en soft skills y hard skills es indispensable para el éxito de cualquier PYME, ya que potencia la productividad y garantiza que los empleados estén preparados para enfrentar los desafíos tanto técnicos como interpersonales. La colaboración activa entre los gerentes funcionales y el equipo de Recursos Humanos es fundamental para asegurar que estas capacitaciones sean efectivas y estén alineadas con las necesidades específicas de cada área, permitiendo a la PYME contar con un equipo capacitado y preparado para el crecimiento y la adaptación.

Si este es un desafío en tu empresa, no dudes en escribirme o agendar una consulta gratuita para ver cómo podemos apoyarlos.

Enrique Plascencia

Asesor PYME